31.8.12

La cultura albaceteña a debate




El subtitulo de la obra biográfica El Brillo de los Días, La cultura albaceteña del siglo XXI, me sirvió de motivo elemental para una charla-coloquio con varios de los protagonistas de dicha publicación en torno al momento cultural de la ciudad, tras once años de trasiego en el nuevo siglo. Los invitados, pertenecientes a diferentes disciplinas artísticas, opinaron sobre el apreciado cambio generacional de nuestros artistas, su identidad cultural, la constatación de ése papel fuera de nuestras fronteras, el necesario reciclaje que conlleva en el costumbrismo cultural de Albacete y la espantosa amenaza de los recortes institucionales. La escena, las letras, la ilustración, el cine, la música, las artes gráficas y demás especialidades fueron objeto de opiniones autorizadas, abiertas absolutamente al público que asistió a la Biblioteca Pública de los Depósitos del Sol el pasado día 23 de abril, con motivo de la gran fiesta del libro.


Camelot


Como caballeros (y señora) en mesa redonda, literalmente, rodeados del público asistente y de todos los libros del mundo, también textualmente, los héroes del Camelot manchego, Marta Torres, directora teatral, Arturo Tendero, poeta y escritor, Alfonso García Ródenas, ingeniero de sonido y productor discográfico, José Manuel Zamora, director de Abycine, Eloy M. Cebrián, escritor, Fernando López, artista plástico, Andrés García Cerdán, poeta y escritor, Joaquín Pascual, músico y Miguel Ángel González, director de Galería La Lisa, se abrieron sin tapujos a la cuestión debatida con el resultado final de una hora y media de fragor intelectual, virtuoso y sereno, francamente interesante. A continuación transcribo algunas de las intervenciones más sugestivas:


¿Tiene alguna ventaja, para un creador, el hecho de vivir en una ciudad como la nuestra?

Albacete es una ciudad que se ve muy bien, es una buena ciudad para vivir, pero no es facil para un artista. No es fácil desarrollar los proyectos aquí. La ciudad no está educada para el arte contemporáneo, por ejemplo. Demasiado tiempo sin haber galerías de Arte contemporáneo. (Miguel Ángel González)

Como músico y compositor, me resulta más sencillo vivir en una ciudad como Albacete. Lejos de la presión de las modas en las ciudadades grandes. Supone un aislamiento, estar fuera del contexto que manda la industria. A mi, me resulta más interesante. Quizá le falte un poco de preparación, ése chispazo donde se entienda la creatividad. (Joaquín Pascual)
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Para un creador que quiera hacer proyectos audivisuales aquí, no tiene por que suponer ningún handicap vivir en Albacete. Es más, resulta cómodo utilizando las nuevas tecnologías; es más fácil que nunca si sabes moverte en los ambientes, incluso ventajoso. Otra cosa es la proyección y promoción fuera de la ciudad. Respecto al Festival Abycine, la ciudad ha ido madurando lentamente, pero ha ido madurando. El problema es que para que se nos haga caso fuera, todavía la losa de lo que viene de provincias es muy grande. Un proyecto que no venga de una gran ciudad o apadrinado por una gran institución, por muy bueno o muy trabajado que esté cuesta mucho difundirlo. (José Manuel Zamora)


José Manuel Zamora y Andrés García Cerdán

Albacete es una ciudad privilegiada en muchas cosas y no tanto en otras. Estamos a medio camino en todo. A veces no se entienden o se apoyan los proyectos como uno quisiera. Sin embargo, me da la sensación de que ese estar fuera de las grandes capitales de la cultura, de las grandes referencias puede ser beneficioso. Estás más aislado, eres más tú en tus propuestas, más independiente, escapas al mainstream, a las tendencias, por lo que tu arte será más ublicuo, marginal, un arte desde el secreto. (Andrés García Cerdán)

Para el teatro, Albacete es una ciudad complicada. Es una labor completamente colectiva y como en esta tierra nunca nos hemos tomado en serio la formación (somos cuatro los que nos dedicamos a esto) si quieres compartir el trabajo con otras personas, indudablemente tienes que ir a buscarlas fuera. Esto pasa. Como no hay formación, los actores, escenógrafos, iluminadores, tienen que irse de aquí y terminar su formación fuera de nuestras fronteras. En el teatro no nos podemos aislar de nada, como pasa en otras disciplinas. Nosotros vivimos volcados hacia afuera. La ciudad tiene sus ventajas claro. Nunca diré que el público de Albacete no está preparado. Eso lo entiendo como parte de mi responsabilidad. Eso sí: desde que se cerró el TEMA, que es de donde partimos todas las compañías de la ciudad, los cuatro directores que hay, los veinte actores, etc., no ha vuelto a haber nada de formación. (Marta Torres)


Marta Torres
Lo que nos regala Albacete es lo que regala a todo el mundo que vive aquí. Regala tiempo, que es muy importante. Nos regala sosiego, calidad de vida, distancia. Lo que nos quita, la verdad, es mucho. Nos quita la facilidad para proyectarnos, darnos a conocer. En la literatura, y a pesar de las nuevas tecnologías, aquí funcionan mucho las relaciones personales, el tú a tú, a quien conoces, donde te dejas ver, con quien hablas, etc. Los escritores que yo conozco de fuera de la ciudad, en Madrid, en Valencia, dedican la mitad de su tiempo a dejarse ver por todo tipo de eventos, presentaciones, charlas y demás, entonces obtienen algún resultado. En Albacete no hay editoriales, por tanto es complicado. Si se quiere hacer algo serio en literatura necesiaramente tienes que salir de aquí. Creo que tambien pasa en cualquier linea de arte. (Eloy Cebrián)

Todo depende de la actividad artística a la que te dedicas. Hay algunas que necesitan el contacto directo con los creadores. La de escritor, en realidad solo necesitas estar contigo mismo, con el papel. Para los que somos tranquilos nos viene bien vivir en Albacete. Otra cosa es cuando quieres difundir lo que estás haciendo. Al fin y al cabo escribes para que te lean. En Albacete las relaciones que debes tener para proyectarte son muy complicadas. Aquí en Albacete, si no nos espabilamos y no conocemos gente de fuera, no hacemos nada. Para poder publicar en buenas editoriales tenemos la alternativa de los premios, que siempre es una lotería. Así que debemos buscarnos la vida conociendo gente, intentando de alguna manera contactar con los círculos donde se cuecen las habas. Es una lucha dura y casi siempre condenada a estar en un segundo plano. Somos escritores de segunda división, independientemente de la calidad porque, por ejemplo, el libro de Andrés (Cármina, de García Cerdán) no tiene nada que envidiar a lo que se publica en poesía este año en España. Claro, si no hay una buena promoción detrás pues no hay nada que hacer. (Arturo Tendero)


El público se acomoda
En esta tierra, mas que ventajas todo es una lucha, un reto. La labor creativa en esta ciudad es una situación de crisis desde el principio. Creo que el arte debe tener capacidad para resolver este tipo de situaciones. En la ciudad es lamentable nuestra situación. La enseñanza artística está a níveles de artesanía, no de arte. En esas circunstancias nos tenemos que ir fuera. A estudiar y volver para desarrollar nuestros conocimientos. De alguna forma, la ciudad de Albacete nos ha criado, nos ha sacado fuera a estudiar y nos ha recuperado para volver a cubrir necesidades, deficiencias y en la medida que podamos con ayudas, a veces si, a veces no, de los políticos. Deberíamos desarrollar un ambiente artístico lo cual me parece un reto. Un reto muy interesante. Hay que recoger energías, motorizarse y comenzar a hacer cosas. Hay una galería (La Lisa) que intenta sacar artistas sin haber mercado del arte, las ayudas que recibe son mínimas. La cuestión de vivir del arte se ha dejado inevitablemente de lado, por lo que peor no se puede estar. como no se puede estar peor, debemos ir a mejor en todo caso. Esa es la gran ventaja de vivir en Albacete, que siempre, hagamos lo que hagamos, debemos ir a mejor. Peor no se puede estar. Yo llevo una compaginación con Valencia, porque es necesario establecer puentes con otras ciudades y es una manera más de unir, de hacer una trama cultural con el resto del mundo sin quedarnos tan aislados como hemos estado durante tantos años. Lamentablemente debo decir que los políticos han fomentado esta ignorancia porque les interesaba en parte que no hubiera demasiada crítica. A pesar de todo, luchamos contra nuestros propios políticos, contra el ambiente artístico, la falta de dinero, la falta de cultura en general. Nos debatimos siempre en el sacrificio. Nos hacemos más duros. Nos convencen menos cosas y menos lírica y vamos más al grano. La ciudad ha sido lamentablemente cercenada en sus barrios históricos desde hace muchos años: arrancarnos El Alto de la Villa es arrancarnos parte de nuestra historia y a pesar de todo eso tenemos que seguir luchando. No, no tiene ninguna ventaja ser artista en Albacete, pero aún así creo que el que es artista en Albacete tiene que poner más leña al horno que el que es artista en otra ciudad. (Fernando López)


Fernando López (arriba, Nonaino Dance dj)

Intrínsicamente la creación artística no debe ser negativa. Puedes crear en cualquier sitio. El problema es  la mercantilización de tu arte. Para vivir de tu trabajo, de tu creación, debes salir fuera de Albacete. Tienes que venderte, salir a otros mercados. Albacete es una ciudad pequeña sin mucha tradición artística. Con pocos pioneros y muy poca gente con la que compartir escena e inquietudes con las que luchar. A nivel creativo tiene sus ventajas. A nivel mercantil no. Incluso Valencia, otra capital de provincias. Ni siquiera Madrid donde me hubiera pasado lo mismo en ocho años. Fui al ojo del huracán, donde se mueve toda la industria discográfica. Vivir en Albacete es tan bueno como cualquier otro sitio por lo menos para empezar. Vas a empezar a pintar, escribir, dibujar, tocar música, igual aquí  que en cualquier otro sitio. No hay escuelas, evidentemente, pero en algunas de nuestras necesidades (ingeniería técnica de sonido) tampoco existen en España. Todo eso se ha suavizado gracias a las grandes tecnologías actuales. Internet es el gran invento de la humanidad. Ahora es un poco más fácil. Se abren nuevos mercados, nuevos accesos, nuevas distribuciones. No creo que sea una gran desventaja, a priori. (Alfonso Ródenas)

Las subvenciones, los temidos recortes de la señora Cospedal

- Siempre vamos a salto de mata tapando huecos. La formación es un tema perdido. Una lastima. Si que creo que el audiovisual es un sector fundamental para incidir en la formación desde la gente más joven por lo que genera también de caldo de cultivo, sinergias y con unas posibilidades enormes. El apoyo público es imprescindible; por desmitificar el tema, los presupuestos son mínimos. Reclamamos el derecho como cualquier otro sector cultural, porque no olvidemos que la cultura también tiene un redundante económico que a veces se olvida. Albacete, a lo mejor no sea un ejemplo de eso por la falta de infraestructuras culturales o de industria cultural. En las artes escénicas, como en la música, como en las artes audiovisuales, existe un retorno económico en cuestión de puestos de trabajo y de valor que no se puede olvidar.
Abycine no peligra porque los que estamos detrás somos bastante cabezones, tozudos. Hemos hecho callo de luchar contra la crisis, más que en otros sitios, y con las dificultades de siempre. No peligra en el sentido de que nosotros no vamos a arrojar la toalla, pero el proyecto se está adecuando a como están los tiempos. (José Manuel Zamora)




Hay dinero: si existe un Director General de Cultura, ahí hay dinero, si existe un Concejal de Cultura, ahí hay dinero.

- Sí. Absolutamente pueden peligrar las compañías teatrales en Albacete. No es que vayan a peligrar, es que están peligrando. La situación actual está absolutamente al límite. Arrastramos una importante deuda todas las compañías. No es que seamos muy originales. La problemática se repite en muchas ciudades como Albacete. El problema de que no haya formación no es que se vayan nuestros actores, es que se van y no viene nadie, porque cuando estaba la Escuela Municipal (el TEMA) algunos se iban pero otros entraban. Ahora mismo está peligrando todo. Si seguimos adelante es porque somos gente que nos es imprescindible dedicarnos a esto. Entre otras cosas somos ya mayores, no sabemos hacer otra cosa y además queremos seguir haciéndolo. Eso de que no hay dinero nunca nos lo creamos. Dinero hay. Poco o mucho pero hay dinero. Lo que falta es voluntad política para destinar ese dinero a proyectos culturales, pero dinero siempre hay: si hay un Director General de Cultura, ahí hay dinero, si hay un Concejal de Cultura, ahí hay dinero. (Marta Torres)




- A lo mejor estamos perdiendo un poco el norte, desviándonos de la cuestión que nos trae aquí, que no es el puto dinero sino la cultura y las posibilidades de alimentar una cultura que esté viva y que sea capaz de crear una base cultural creativa. Quiero decir, me da tanto asco que en los telediarios solo se mencione la palabra dinero, economía, bolsa, la prima... que yo creo que nos están comiendo la cabeza. Solo les falta vomitarlo sobre nosotros y convertirnos en la escoria de un capitalismo caníbal absolutamente injusto que nada tiene que ver con lo que cada uno de nosotros tenemos como necesidad de expresarnos. Añadiría también que se ha pecado muchísimo en este país de la cultura de la subvención que finalmente no ha dado ningún resultado, sino empobrecimiento a todos los niveles. Creativos y espirituales, que esto es lo peor. De todas formas reconozco que cierto apoyo de alguna política cultural es necesario. También una cultura de la política. No me gustaría que acabáramos aquí todos envenenados con la palabrita de moda (dinero). (Andrés García Cerdán)

- Los que nos dedicamos a la literatura damos la nota un poco en esto, porque para escribir pues... hombre... nos pueden subvencionar los folios, ¿no?. Bien, no me parece que tenga ningún sentido subvencionar a un escritor directamente, aunque es verdad que se ha hecho y no hace tanto tiempo; sin embargo si que hecho de menos el dinero público que se empleaba en la publicación de revistas literarias. Un fenómeno muy característico nuestro que ha sido un movimiento juvenil, tipo fanzine, que ha evolucionado hacia cosas mas serias conviviendo con lo otro también, lo cual estuvo muy bien. Todo eso está desapareciendo. Eso servía para muchas cosas. Servía para que la gente que empezaba a escribir se diera a conocer, servía para animar a la gente a escribir más y servía también para poner Albacete en el mapa literario porque igual que las revistas literarias le daban salida a muchos escritores de aquí, también publicaban a escritores de fuera y escritores de prestigio y ahora mismo prácticamente ha quedado sólo Barcarola,. Han llegado a haber seis revistas literarias. En el momento que no hay dinero para pagar a la imprenta se acabó la revista literaria. Eso si que lo hecho mucho de menos y no se si lo vamos a recuperar. Si la gente de Abycine, que arrastra un montón de público, las está pasando canutas, me temo que nosotros nos podemos declarar directamente difuntos. (Eloy Cebrián).




- Yo echo de menos la ayuda institucional pero no solamente a la hora de promocionar y subvencionar proyectos, que también hace falta, pero la echo mas en falta todavía de una forma estructural. Como ocurrió en su día con el TEMA. Aquella escuela creó todos los grupos de teatro que están funcionando (y muriendo ahora), en Albacete. El Taller de Arte, en su día, creó igualmente una buena promoción de pintores. El Grupo de Editores de la Diputación creó un entorno de calidad importante. En definitiva, ¿qué andábamos buscando?: crear criterio. Que la gente tenga un marco de referencia que sepa lo que es bueno y es malo en las artes. Independientemente de los gustos. Y ahí, en ese terreno estructural está la educación. Sería importantísimo que en los colegios, en los institutos, también se fuera formando ese gusto por las artes. Ese criterio. Ese marco de referencia. Eso lo necesitamos y es igual que fuera en Albacete o en París. Eso se puede hacer en cualquier sitio si hay una estructura y una verdadera intención de hacerlo. Es un trabajo a largo plazo. Es un trabajo que necesita criterio a la hora de ponerse a trabajar, no se improvisa. Claro, si empiezo a colocar a mis amigos porque son mis amigos pues no lo estoy haciendo por criterio, por lo cual los resultados no van a ser los mismos que si elijo a personas que tienen criterio. Y eso es lo que pasa con la política. La política piensa en el día a día y además terminan colocando a los amiguetes. Eso nos empobrece. No pasa solo en Albacete, está pasando en todos los sitios. (Arturo Tendero)




- Creo que es lamentable que tenga que ser subvencionado el arte. Imagino que el arte debe vivir por sí mismo. Estamos hablando de que si no vive hay que alimentarlo. Que sea necesario es porque la educación evidentemente ha fallado. Entonces el político debería imponer lo que debería haber. Eso es como cuando se hacen industrias subvencionadas por el estado para que parezca que hay industrias en un país. Por un lado es verdad que no debería ser y por otro lado, sin embargo, le doy la razón a Marta y a Arturo, en el sentido de que ya que no hay educación, no ha habido una cultura, es evidente que entonces sí que tiene que actuar el Estado. Es una carencia. Igual que hay hospitales, bomberos, igual que hay otro tipo de servicios, hace falta un servicio cultural. No es lo mejor. En esta ciudad es duro el tema y hay que afrontar primero una educación cultural y artística porque la educación, por si sola tiene mucho que ver con la artesanía, con actividades artísticas que entretengan al público, pero el Arte, con mayúsculas está completamente ausente y ése es el problema. Efectivamente falta ortopedia cultural. Lo ideal es tener la opción verdadera, no la de palo. En este aspecto, la subvención es un mal necesario por un lado y por otro, es evidente que clama al cielo una educación en condiciones. Yo creo que ya está bien. Exigiría, pondría todo patas arriba para que los que vienen detrás de nosotros no tendrían que comerse lo mismo porque llevamos muchos años con este tema. No hemos avanzado ni un milímetro desde el franquismo. Hay que tomar determinaciones. La gente no tiene la cultura necesaria pasa saber que tiene que darle vida al arte desde el espectador, que es el último destinatario y el que te tiene que poner a ti en tu papel, no el Estado. Por supuesto, el hecho de ser subvencionado transmite mucha cantidad de perversiones: amiguetes, dinero que se va para otro sitio... eso lo sabemos todos. (Fernando López)

- Estoy de acuerdo en que hay que fomentar una educación que provoque inquietudes artísticas en la gente. Una demanda pública para disfrutar el arte en general. Todo lo demás son parches sin sentido. Hay sectores artísticos que requieren apoyos, subvenciones, dinero, vamos. Es cierto que es mucho más fácil ponerte a escribir un folio que organizar una obra teatral o una ópera. Pero si en las escuelas, en los institutos, no se fomenta el arte es el final. Si dependemos de la desfachatez total de educación que es la televisión que pone el nivel cultural a ras de suelo vamos arreglados. Hablo casi desde la Meca del anti-arte a todos los niveles (Los Ángeles, California). En Estados Unidos no hay subvenciones, hay mecenazgos. Son los que apoyan la carrera artística de escritores, pintores, músicos, de todo tipo de creadores. (Alfonso Ródenas)


Joaquín Pascual con la prensa


- Efectivamente, el arte, la cultura, lo tenemos que entender como un servicio público. Nos hemos dejado convencer para que hablemos nosotros mismos del tema de las subvenciones. No, la cultura es un servicio público. A nadie se le ocurre pensar que el hospital está subvencionado, es un servicio que el Estado da a los ciudadanos con el dinero de sus impuestos. ¿Por qué?, porque se valora. ¿Qué le pasa a la cultura y al arte, que no está valorado?. Y nuestra misión es ponerlo en valor. Efectivamente no somos Estados Unidos, como no somos Estados Unidos nuestra ley de mecenazgo dice que solo existe si una empresa pone dinero en (al loro): Fundaciones Públicas o el tercer sector que son las ONGs, las organizaciones sin ánimo de lucro. Es decir, ninguno de los que profesionalmente nos dedicamos al arte o a la cultura podemos beneficiarnos de un mecenazgo. Los mecenas están poniendo el dinero en las administraciones públicas, en las fundaciones públicas y estas tienen que distribuir ese dinero hacia los ciudadanos y hacia los que creamos. Eso está así organizado desde los años ochenta, cuando muchos de nosotros no teníamos edad para tocar bola. Lo que no podemos hacer es cargarnos ahora todo el sistema a costa de cargarnos toda la expresión artística. (Marta Torres)


con Gregorio Osante, director de la biblioteca


Fotos y grabación del acto: Paco Andrés

Mi especial agradecimiento a Goyo Osante y todo el personal de la Biblioteca Pública de los Depósitos del Sol.